Si alguien me hubiese dicho antes de venir a este mundo, que la vida era un regalo de Dios complicadamente bello, que mi vida iba ser dramáticamente intensa jajaja, quizás hubiera solicitado un manual de sobrevivencia.
Definitivamente la vida es un milagro y Dios pone a prueba la fortaleza de sus hijos, la auténtica fe que tenemos.
En mis 31 años de vida, he superado muchas pruebas que Diosito me ha enviado. Admito que sí soy medio renegona y digo Diosito ya dame un descansito, que tantas pruebas agotan, pero sí considero que cada una de esas pruebas me ha fortalecido, cada prueba me ha hecho darme cuenta del inmenso valor de la vida.
Todos tenemos sueños que deseamos volver realidad, pero para lograrlos, antes que nada necesitamos salud, necesitamos más tiempo en esta vida para hacer que esa maleta llena de sueños se vaya aligerando. Yo aún tengo muchos sueños por realizar, aunque no le temo al último suspiro, sí deseo que Diosito me siga bendiciendo con la posibilidad de abrazar a mis seres queridos, de abrazarlos y besarlos, de decirles cuánto los quiero, de sentirme ilusionada, enamorada, amada, quiero que Diosito me dé unos años más de vida para alcanzar el sueño más grande que tengo que es formar una familia, encontrar el amor verdadero, poder viajar a Europa, viajar al menos una vez en mi vida a Nueva York, regresar a México, y solo si el tiempo y la vida me lo permite poder publicar un libro.
Y con respecto a mi blog, el sueño ya se hizo realidad porque para una chica como yo, el haberme animado a tener un blog de moda, y aprender a esquivar la artillería pesada de comentarios negativos, no ha sido prueba fácil de cumplir, pero aquí sigo con Fashion Everywhere, ya voy 5 años y 5 meses; y vamos por más. El blog irá ofreciendo una perspectiva más íntima, más cálida, más humana, poco a poco, sin dejar de escribir sobre temas de moda y de interés al público femenino, pero deseando por sobre todas las cosas calar en los corazones de quienes me leen, ese es mi objetivo más grande.
Mañana seré fuerte por mí, por ti, por mis seres queridos, por esa vida que Dios aún me permite vivir.
Gracias a unaartistadesconocida by Maria Hermoso por las ilustraciones que acompañan este post.
Un abrazo,
Ana López Jiménez
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