Hoy he regresado a la oficina, luego de 14 días de descanso médico, y se siente extraño, siento como si la película de mi vida hubiera quedado en STOP unos días, y hoy que me reincorporo a mis labores diarias, veo todo diferente, siento que no me hallo y a la vez siento que quiero ponerle PLAY a mi vida al máximo y no se detenga hasta lograr ser plenamente feliz.
Dicen que somos autores de nuestras vidas, que no existe eso del destino, que nosotros mismos forjamos cada acontecimiento, con nuestras buenas o malas decisiones. Yo creo que es un 50-50. Pienso que sí es cierto que nosotros podemos cambiar el rumbo de nuestras vidas, pero que Dios es quien toma la decisión final, es quien nos puede ayudar a salir del abismo.
Hoy quiero pensar en que poco a poco iré recuperando la movilidad de mi brazo izquierdo, que poco a poco iré perdiendo el temor al dolor que aún acompaña la herida de la cirugía, que poco a poco iré pensando en planes a futuro, en ahorrar dinerito para poder viajar en mis vacaciones en algunos meses más adelante.
Creo firmemente que los pensamientos positivos atraen cosas positivas, y hoy deseo pensar solo en cosas buenas. Tengo fe en que Dios me ayudará a mantener alejada a la gente mala de mi vida, que me rodeará de ángeles hechos personas que me darán alegrías, y me harán recordar que la vida es bonita y que claro que vale la pena vivirla.
¿Qué opinan ustedes?
Gracias a unaartistadesconocida by Maria Hermoso por las ilustraciones que acompañan este post.
Un abrazo,
Ana López Jiménez
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